¿Pueden los Dallas Mavericks remontar un 3-0?
+ ¿Quién ha quedado peor con el fiasco Hurley, los Lakers o Wojnarowski?
Boston Celtics 3 - 1 Dallas Mavericks
Nunca jamás se ha remontado un 3-0 en la historia de los Playoffs de la NBA. 156-0.
Ese porcentaje de no-remontadas, evidentemente, se mantiene en la historia de las Finales de la NBA. El equipo que se ha puesto con 3-0 tiene un balance 14-0.
La NBA es la única de las grandes ligas estadounidenses cuyos Playoffs se juegan al mejor de 7 en la que no se ha producido nunca esta remontada. Pero tampoco es que sea algo común en el resto de ligas. Entre todas ellas (NBA + NHL + MLB), el equipo que se ha puesto 3-0 ha logrado un balance 400-5. Los que remontaron y ganaron su serie fueron los siguientes:
1942 - Toronto Maple Leafs (NHL)
1975 - New York Islanders (NHL)
2004 - Boston Red Sox (MLB)
2010 - Philadelphia Flyers (NHL)
2014 - Los Angeles Kings (NHL)
De todos esos, solo los Toronto Maple Leafs lo hicieron remontando una final y llevándose el título. Hace ya 82 años de eso.
En cuanto a la NBA, en su historia hubo 3 equipos que iban perdiendo 3-0 y llegaron a empatar a 3-3 la serie, para luego perder en el séptimo partido:
1951 - Rochester Royals (vs New York Knicks)
1994 - Denver Nuggets (vs Utah Jazz)
2003 - Portland Trail Blazers (vs Dallas Mavericks)
2023 - Boston Celtics (vs Miami Heat)
Como podéis ver, son casos muy puntuales incluso aquellos que llegaron a empatar la serie. De todas maneras, alguna vez se remontará un 3-0 en la NBA, es una cuestión de pura probabilidad a la que ayudará la volatilidad que da a los equipos, los partidos y las series la influencia del triple. Para ello se tendrán que dar ciertas condiciones, eso sí.
La condición que parece más probable que influya en una remontada de un 3-0 en una serie de Playoffs es la salud. Es decir, las lesiones. Cuando se remonte un 3-0 por primera vez, seguramente hablaremos de lo importante que fue una lesión. Puede ser que un equipo esté sin su gran estrella, un candidato a MVP o mismamente el jugador más valioso de la NBA, durante los dos o tres primeros partidos, se metan en un agujero de 0-3, pero luego la influencia de ese jugador haga que se de la vuelta.
Pero es el otro camino el que es más fácil imaginarse: que el equipo que se ha puesto 3-0 sufra la lesión de su estrella o sus estrellas, y esto beneficie al equipo que haga la remontada. Que la salud se interponga en el camino del equipo que lo tiene todo de cara de una forma que no sean capaz de superarlo.
En el caso que tenemos entre manos, no se dan esas circunstancias. Los Boston Celtics han sufrido la lesión de Kristaps Porzingis, que se ha perdido los dos últimos partidos, pero está claro que no es un factor tan importante como para desestabilizar toda la serie con un 3-0 o un 3-1 en el casillero. Los Celtics ya han demostrado a lo largo de estos Playoffs que son capaces de ganar incluso sin el letón.
Entonces… ¿qué otra circunstancia podría hacer que se remonte por primera vez esa situación? Quitando las lesiones o las sanciones, tendrían que conjuntarse al menos dos de estos tres elementos para que los Dallas Mavericks obren el milagro:
Un caso fuerte de variación en el acierto de triples. No es que los Boston Celtics estén teniendo un gran porcentaje en triples en estas Finales, un 33.9% hasta ahora, pero el de los Dallas Mavericks es aún peor, un 32.2%. Si los Mavs de repente empiezan a meter un 40% de sus triples (en la serie contra OKC metieron un 39.7%) y los Celtics siguen lanzando como hasta ahora o peor, eso puede ayudar a decantar la balanza. A lo largo de toda una temporada, o de unos Playoffs, todo tiende a corregirse y sería muy complicado imaginarse a Boston en esos valores. Lo que pueda suceder en tres partidos sueltos ya es otra historia.
Tres clases maestras de Luka Doncic. Incluso con su equipo en las Finales, no podemos decir que Luka Doncic haya tenido unos Playoffs excelentes. Ha estado mermado por lesiones y por la niebla mental que en ocasiones le invade cuando se frustra, ya sea porque su cuerpo no le deja hacer lo que desea, o porque considera que los árbitros no le están dando un trato justo. Sin embargo, sí que hemos visto una clase maestra de Luka o algo cercano a eso en uno de los partidos de cada serie: en el Game 5 contra Clippers, en el Game 5 contra OKC, en el Game 5 contra los Timberwolves, y en el pasado Game 4 contra los Celtics. Eso son cuatro grandes partidos de Luka Doncic en estos Playoffs. Ahora necesitan tres más.
La mejor versión de Kyrie Irving, también en Boston. Ya hemos visto dos partidos muy buenos seguidos de Irving contra los Celtics, incluso con su buena defensa. También ha roto ya la racha de derrotas seguidas contra los Celtics desde que le cayó el mal de ojo por pisar su logo. ¿Será capaz también de superar la anulación mental que sufre cada vez que juega en Boston? ¿Y de hacerlo no solo en una sino en dos ocasiones más?
Son muchos los elementos que tienen que conjuntarse para que remontes un 3-0, por eso no se ha hecho nunca. Incluso aunque todo te salga bien, en circunstancias normales los Boston Celtics son tan buen equipo que parece imposible que les puedas ganar cuatro partidos seguidos.
Esta noche, los Dallas Mavericks verán cómo los Boston Celtics se coronan, o seguirán intentando hacer historia.
Ahora que ya van calmándose las aguas y todo parece volver a indicar de nuevo que JJ Redick tiene todas las papeletas para ser el nuevo entrenador de Los Angeles Lakers, yo no puedo evitar seguir pensando en qué ha podido pasar con aquella irrupción de los rumores sobre Dan Hurley y cómo es posible que haya quedado tanta gente mal por el camino.
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